El lobito estaba en el ingreso a una vivienda del barrio 25 de Mayo, los vecinos estaban muy temerosos de que esté enfermo con gripe aviar y por eso llamaron a todas las autoridades pero nadie llegó en dos horas de espera. Los únicos que se acercaron fueron policías que con un equipo de protección similar al de COVID, lo levantaron lo metieron en bolcas y lo subieron a una caja para luego dejarlo en la playa de Km 4.