Sancho, de 29 años, “cortó el cuerpo en 14 pedazos” y puso algunas partes en varias bolsas que tiró al basurero
El joven influencer Daniel Sancho, hijo del actor Rodolfo Sancho, ha sido detenido en Tailandia acusado de asesinar y desmembrar a otro hombre. Según las primeras informaciones que se han conocido del caso, fue él mismo quien confesó el supuesto crimen a la policía tailandesa después de estar siendo interrogado desde este viernes.
El propio Sancho denunció la noche del jueves en una comisaría de Kho Phangan la desaparición de su amigo, quien supuestamente llegó un día antes a la isla, según desvela EFE a través de fuentes de las autoridades tailandesas.
Ambos se encontraban veraneando juntos en Koh Phangan, una isla turística al sudeste de Tailandia muy concurrida estas fechas por su famosa fiesta de la luna llena. Daniel Sancho (29 años) fue el jueves a la comisaría para denunciar que la víctima, Edwin Arrieta Arteaga, de 44 años, un prestigioso cirujano plástico con una clínica en Montería, al norte de Colombia, había desaparecido. Aquel día, los agentes que lo tomaron declaración destacaron las marcas de varios cortes y arañazos que Sancho tenía por el cuerpo.
La declaración del español se produjo después de que ya hubiera saltado a los medios la noticia de que habían sido encontrados restos humanos en un basurero de la isla. Los recolectores de basura descubrieron una pelvis e intestinos troceados dentro de un saco de fertilizante. El viernes se encontraron más partes del cuerpo en una bolsa de plástico negra en el mismo lugar, que contenía dos piernas, una camiseta negra, un par de pantalones cortos y un par de calzoncillos.
Según ha asegurado el diario tailandés Bangkok Post, Sancho inicialmente negó cualquier participación, pero finalmente, después de que los agentes lo presionaran en el interrogatorio, habría confesado el crimen. “Lo admitió”, declaró también a la agencia AFP el jefe de policía de la ciudad, Panya Niratimanon.
Según lo narrado por los investigadores del caso, Sancho habría explicado que llevó a Arrieta a su habitación y que el hombre quería tener sexo, pero que él se negó. Entonces, en un ataque de ira, lo golpeó, lo que provocó que la víctima cayera al suelo y perdiera el conocimiento después de darse otro golpe en la cabeza con una bañera.
Después, siempre según las mismas fuentes, Sancho “cortó el cuerpo en 14 pedazos” y puso algunas partes en varias bolsas que tiró al basurero. Otros restos los metió dentro de una bolsa de viaje que lanzó al mar desde la playa de Salad, cerca de su hotel.
Tras deshacerse de los restos, la policía apunta a que Sancho fue a la fiesta de la luna llena acompañado por dos mujeres, y que fue al acabar el evento cuando se dirigió a la comisaría para denunciar la desaparición de Arrieta.
Sobre el desarrollo del suceso, los investigadores han apuntado que creen que pudo ser premeditado porque Sancho habría comprado un cuchillo, guantes de goma, una esponja de cocina, una botella de producto de limpieza y bolsas de basura un día antes de la desaparición del colombiano.
Pol Lt Gen añadió que los familiares del cirujano colombiano han dicho a los investigadores que el hombre mantenía una relación de más de un año con Sancho y que ambos habían quedado en encontrarse en Tailandia para asistir a la fiesta de la luna llena, donde las playas están repletas de Dj que ponen música hasta el amanecer.
“Un examen policial del video de seguridad de varios lugares de la isla deja claro que Sancho fue la última persona vista con la víctima antes de que se encontraran las partes del cuerpo humano”, dijo el comisionado. “Todavía no sabemos el móvil del asesinato. Inicialmente creemos que podría deberse a un ataque de celos“.
