El trágico suceso ocurrió este martes por la madrugada en el establecimiento rural “El Moro”, a unos 35 kilómetros de la localidad Buena Esperanza, en el sur de la provincia de San Luis. La víctima fue identificada como Camilo Tallione.
El joven, domiciliado en la mencionada localidad, sufrió una herida a la altura del cuello, lo que le provocó una lesión mortal de una arteria.
Según el informe policial, cuando el oficial llegó al campo -tras recibir el pedido por radio-, encontró que el personal médico había constatado la muerte de Tallione.
Los cuatro jóvenes se habrían bajado en la tranquera de la estancia y tres de ellos “se separan para guiar a la piara (chanchos) y el restante se queda atrás de una loma esperando”. Más adelante describe que “al observar un bulto y desconociendo que uno de los tres jóvenes se había quedado atrás, efectúa un disparo con el fusil y escucha que desde la oscuridad Tallione vocifera `me pegaste, me pegaste´”. El joven herido caminó unos metros en dirección al tirador y se desvaneció ya sin vida.
Siempre siguiendo con el relato del agente policial interviniente, el tirador comenzó a disparar al aire para llamar la atención de los dueños del campo, objetivo que consiguió y así dieron aviso a emergencias y a la Policía local.
En el parte policial también informó que Camilo Tallione era hijo de dos policías de la provincia de San Luis.
Las actuaciones judiciales están a cargo del fiscal de la Segunda Circunscripción Judicial, Francisco Assat, y la investigación la lleva adelante personal de Homicidios de la Unidad II.