Un activista le lanzó varios huevos al rey británico, Carlos III, en medio de una ceremonia oficial por la inauguración de una estatua en honor a Isabel II. Según testigos, lo hizo en reclamo por el papel de la corona en la esclavitud.
El rey del Reino Unido, Carlos III, y su esposa, la reina consorte Camila, fueron agredidos a huevazos durante su visita de este miércoles a la ciudad de York, donde el nuevo monarca fue recibido por el alcalde y una pequeña multitud de vecinos que esperaba para saludarlo.
Carlos III se acercó al público presente que aguardaba tras las vallas de seguridad para saludarlo, cuando un hombre comenzó a lanzarle huevos a él y a su mujer, Camila Parker Bowles. Los proyectiles cayeron muy cerca del rey pero no llegaron a impactarlo, gracias al rápido accionar de sus custodios.
La escena fue registrada por varios de los presentes y las imágenes se viralizaron en cuestión de minutos. Pese al violento episodio, el monarca británico continuó con la ceremonia tradicional y no se lo vio afectado.
El diario británico Daily Mail explicó que el atacante fue interceptado y arrastrado al suelo por cuatro policías luego de su protesta contra la institución monárquica y su responsabilidad histórica en la colonización de territorios.
“Este país se construyó sobre la sangre de los esclavos”, exclamó el hombre mientras era detenido. El agresor fue identificado como un antiguo candidato del Partido Verde y, actualmente, activista del colectivo ecologista Extinction Rebellion.
En tanto, los fanáticos de la monarquía británica le respondieron con gritos: “Dios salve al rey” y “vergüenza”.
Luego del incidente, Charles y Camilla se mostraron tranquilos y procedieron con la ceremonia tradicional, a la vez que saludaban a las personas allí presentes. La pareja estaba en York para asistir a la inauguración de una estatua de la reina Isabel II, la primera que se instala desde su muerte.
Por su parte, el arzobispo de la ciudad, Stephen Cottrell, aseguró que el incidente no evitará que la pareja real se siga acercando a la gente: “Aquellos cuyas vidas son públicas suelen estar en una posición más vulnerable, pero ni el rey ni la reina creen que debamos vivir en un mundo donde nos impiden juntarnos con otros. Hoy a la tarde ya estaban charlando con gente de nuevo así que no creo que se sientan afectados”.