El presidente ruso, Vladímir Putin, cumplió este 31 de diciembre 20 años desde que llegara el Kremlin en los que ha pasado de la cooperación con Occidente en sus primeros años en el poder al abierto antagonismo con EU y la Unión Europea en la última década.
“La relación entre Putin y Occidente ha sido muy dramática. Ha evolucionado desde una relación constructiva a una enconada rivalidad y a casi el enfrentamiento militar en los últimos años“, comentó el politólogo Fiódor Lukiánov, jefe del Consejo de Política Exterior y de Defensa de Rusia.
En estos 12 años Putin dio un vuelco a la política internacional. Forjó una alianza con China, invadido Georgia, reconoció la independencia de Osetia del Sur y Abjasia, anexionado Crimea, intervenido en Ucrania y en Siria, y dado luz verde al envío de mercenarios a varios puntos del globo.
Además, ante la inacción de la Casa Blanca, se convertio en el nuevo árbitro en Oriente Medio al evitar el derrocamiento de Bachar al Asad, vender armas a Turquía y Arabia Saudí, y reforzar lazos con Egipto, Israel e Irak.